Café

Café

25/Apr/2018

El café pertenece a la familia Rubiaceae.

Comprende más de 100 especies, dentro de las principales son dos: arabica (Coffea arabica, con un 80% del total de la producción mundial) y robusta (Coffea Canephora, con un 20% del total). Su fruto es una baya, y sus semillas son un producto de gran valor económico, utilizándose principalmente como bebida nutritiva y estimulante.

El café es un arbusto de porte mediano y de forma semi-cónica, cuyas ramas opuestas y alternas pueden autosombrearse. Las raíces están presentes hasta los 60 cm, pero el 90% del total del volumen de raíces están sobre los 30 cm de profundidad del suelo. La raíz es leñosa y pivotante, con raíces secundarias, terciarias y absorbentes. El tallo es leñoso y de crecimiento vertical.

El arbusto de café crece bajo una amplia gama de condiciones de precipitación; las lluvias óptimas son aquellas que reportan entre 1,200 y 2,800 mm y se registran con una buena distribución durante todo el año. Un periodo corto de sequía se considera favorable al desarrollo y floración del café.

En relación a los requerimientos de suelo, el café es un cultivo que se comporta bien en suelos moderadamente ácidos. No obstante, es frecuente ver que se cultive en suelos de pH muy ácido a extremadamente ácido, producto de las características climáticas (alta precipitación y muy concentrada), de la extracción de nutrientes sin reposición, y del alto uso de fertilizantes nitrogenados amoniacales. Es importante tener un suelo con buen drenaje, estructura física y con un rangos de pH entre 5.5 y 6.5. Cuando el valor del pH sea menor a 5.5, se hace necesario evaluar los contenidos de manganeso (Mn) y de aluminio (Al), pues en estos niveles se encuentran en concentraciones altas y provocan desórdenes fisiológicos. Se recomienda aplicación de enmiendas como cal agrícola, o idealmente cal dolomítica.

Con relación al riego, éste debe ser adecuado para lograr un alto rendimiento y calidad de café, pudiendo utilizarse diferentes tipos de riego, pero con un buen manejo del agua (pivote central, por surcos y riego por goteo). Por otro lado, como el sistema radicular del café está concentrado debajo de la copa de la planta, se puede utilizar fertirriego para poner los nutrientes directamente en la zona de absorción de raíces.

La obtención de un café de calidad dependerá de: La selección de una variedad de alto potencial genético, elección de una localidad adecuada, la implementación de buenos manejos de cultivo y la práctica de adecuados procesos post-cosecha.

 

Etapa de crecimiento

Etapas de Crecimiento

Información Nutricional

La madurez fisiológica de la semilla se alcanza aproximadamente a los 220 días después de la apertura de las flores.

En la Figura siguiente, se muestran las etapas de crecimiento del cultivo del café hasta que llega a ser productivo.

Etapas de crecimiento del cultivo de café
Etapas de crecimiento del cultivo de café.

Etapa I: Floración y frutificación.

Etapa II: Desarrollo del fruto. En esta etapa, la planta pasa por dos períodos críticos: un período crítico de necesidad hídrica, y uno en disponibilidad de N.

Etapa III: Llenado de grano. La etapa de desarrollo del fruto del Café dura en promedio 34 semanas, después de la fecundación. En este período se produce una alta acumulación de materia seca, por lo cual la planta requiere una gran cantidad de nutrientes disponibles, además de un adecuado abastecimiento de agua y un buen control fitosanitario.

Por otro lado, es importante considerar que el café, como muchos frutales, presenta un traslape de eventos que ocurren en forma simultánea e inciden fuertemente en la producción del año, o del año siguiente. Por ejemplo, en la época de llenado y madurez del grano, también el árbol está en el período de inducción floral y de crecimiento de ramillas, con lo cual todas estas etapas requieren que la planta destine sus productos hacia ellas, creándose una competencia por los recursos, situación que muchas veces se traduce en altas producciones en un año y muy bajas el año siguiente.

Etapa IV: Maduración uniforme. Para obtener una buena calidad de café, es importante obtener una maduración uniforme, más aún si la cosecha es mecánica.

La aplicación de una nutrición balanceada tiene como objetivo asegurar el adecuado crecimiento aéreo y radicular para poder almacenar la mayor cantidad de carbohidratos en los órganos especializados. La nutrición adecuada del cultivo es un factor clave para la obtención de buenas cosechas.

Para lograr un adecuado plan de nutrición en el café es necesario conocer la demanda de nutrientes en cuanto cantidad y tipo de nutriente. También es importante conocer el rol de cada nutriente sobre el crecimiento del cultivo, rendimiento y calidad de la producción.

Los elementos claves para obtener un óptimo resultado en el café son: N-NO3, P, K, Ca, Zn y B.

Nutriente Principales nutrientes en el cultivo del café y sus características
Nitrógeno La mayor demanda de Nitrógeno coincide con el mayor crecimiento vegetativo del árbol. El Nitrógeno es el principal nutriente responsable del desarrollo del área foliar de la planta, lo cual es muy importante para obtener una alta producción de café por ha y de alta calidad.

Sin embargo, en período de formación del fruto, el exceso de Nitrógeno no es deseable, ya que alarga el período vegetativo del cultivo e interfiere con la acumulación de fotosintatos en el producto cosechable, afectando el rendimiento y la calidad de las semillas.

Dado el corto período en que debe ocurrir la absorción, el Nitrógeno suministrado como fertilizante debe estar inmediatamente disponible para la planta, con un importante porcentaje idealmente en forma nítrica (NO3), debido a que ésta es la forma en que el Nitrógeno es absorbido preferencialmente por la planta.

Es el elemento de mayor respuesta en la producción de café. Normalmente se aplican 250 kg/ha/año; sin embargo, una fertilización con 200-300 kg de N/ha/año aporta muy buenos resultados, fraccionados en tres épocas de aplicación.

Fósforo El café parece ser muy eficiente en aprovechar el Fósforo disponible aunque el mismo se encuentre en el suelo en pocas cantidades. Se aconsejan dosis de 50-75 kg de P205/ha/año para suplir los requerimientos de la planta y mantener los balances nutricionales.

Una buena nutrición con Fósforo y Calcio mejora la floración y su uniformidad.

Los mayores requerimientos de Fósforo los tiene el cultivo después de la cosecha, cuando el árbol no concentra los carbohidratos en el fruto y permite que exista un crecimiento de raíces en este período.

Potasio El Potasio es el nutriente absorbido en mayor cantidad por las plantas, y prácticamente ningún suelo donde se cultiva café actualmente es capaz de producir altos rendimientos y buena calidad sin aplicación de Potasio a través de la fertilización.

Participa en el transporte de carbohidratos desde las hojas hacia el fruto, por lo que su mayor o menor porcentaje presente en las hojas tendrá relación directa con el rendimiento y con la calidad final del grano. Además, su adecuada concentración en las hojas ayudará a la planta a ser mas eficiente en el uso del agua, y a mejorar la tolerancia a heladas, y de exceso o falta de humedad en el suelo.
Los requerimientos de Potasio son más grandes durante el período de crecimiento y madurez del grano.Un alto contenido de Potasio en las hojas es sinónimo de alta calidad en los cultivos.

En áreas de cultivo que presentan contenidos bajos de Potasio, se ha logrado respuesta económica con el uso de niveles de 100-200 kg de K2O/ha/año.

Magnesio En suelos con deficiencia de este elemento, se han obtenido respuestas positivas con el empleo de 40-80 kg de MgO/ha/año.
Zinc Resultados de diversas investigaciones con distintas dosis de aspersiones foliares de Zinc, sugieren asperjar al follaje una o dos veces al año, particularmente en áreas de siembra nuevas.
Boro En prácticamente todas las zonas de producción de café, se han obtenido muy buenos resultados con aplicaciones de Boro al suelo, como parte de los elementos integrados en las denominadas “fórmulas completas”, así mismo se considera que las aplicaciones de Boro vía foliar son un adecuado complemento de la fertilización al suelo. No obstante se debe advertir que el uso excesivo de Boro puede inducir fitoxicidad, por lo cual se recomienda utilizar dosis que no sobrepasen los 30 kg de B2O3/ha/año.

A continuación es posible observar que los requerimientos de N, P y K van en aumento a medida que la planta va creciendo con los años, llegando al nivel más alto alrededor del 5º año. Asimismo, el N y el K son requeridos ambos en cantidades altas y más o menos similares por la planta.

En la siguiente Figura 1, se muestra la extracción de N, P y K por la planta (a) y la extracción de los frutos de café (b) a lo largo de los años del cultivo.

Extracción de N, P y K por la planta de café
Figura 1a. Extracción de N, P y K por la planta de café.
Extracción de los frutos de café a lo largo de los años del cultivo.
Figura 1b. Extracción de los frutos de café a lo largo de los años del cultivo.

En la siguiente Figura 2, se presenta la distribución de los porcentajes de fertilización de N, P y K en función de los requerimientos de estos nutrientes, de acuerdo a las distintas etapas fenológicas en un cultivo de 3 a 4 años de edad.

Distribución de los porcentajes de fertilización de N, P y K en función de los requerimientos de estos nutrientes, de acuerdo a las distintas etapas fenológicas, en un cultivo de 3 a 4 años de edad.
Figura 2. Distribución de los porcentajes de fertilización de N, P y K en función de los requerimientos de estos nutrientes, de acuerdo a las distintas etapas fenológicas, en un cultivo de 3 a 4 años de edad. – Fuente: Carbajal (1984), mod. Malavolta, 1993.

Tal como se señaló en los roles de los principales nutrientes, los niveles de N más altos son requeridos por la planta durante el crecimiento vegetativo, no así durante el crecimiento de los frutos, momento en el cual se requiere una mayor disponibilidad de K por parte de las plantas, para permitir la obtención de una alta calidad de los granos junto a grandes rendimientos en la cosecha.

Con respecto al P, éste es muy requerido por las plantas previo y durante la floración, con lo cual se debe asegurar su disponibilidad para que ésta se lleve a cabo en forma correcta y uniforme. Por otro lado, la disponibilidad de este nutriente después de la cosecha, una vez que los carbohidratos ya no se dirigen hacia los frutos, es necesaria puesto que en esta época se produce el crecimiento de las raíces, en la cual el P juega un rol fundamental para su normal desarrollo.

Nutriente Bajo Categoría Suficiente Alto
Nitrógeno 2.7 – 3.9 3.2 – 5.5 >5.5
Fósforo 0.2 – 0.29 0.30 – 0.75 >0.75
Potasio 1.5 – 1.99 2.0 – 4.0 >4.0
Calcio 0.7 – 0.99 1.0 – 2.5 >2.5
Magnesio 0.2 – 0.24 0.25 – 0.75 >0.75
Azufre 0.25 – 0.29 0.3 – 0.75 >0.75
Boro 25 – 29 30 – 100 >100
Cobre 3 – 5 5 – 15 >15
Hierro 50 – 69 70 – 300 >300
Manganeso 20 – 24 25 – 200 >200
Zinc 20 – 34 35 – 200 >200

Figura 3. Niveles de nutrientes deseados en un análisis foliar en cultivos de café.
Fuente: Jones, J.B. Jr., Wolf, B. Y Mills, H.A. (1991). “Plant Analysis Handbook. Micro-Macro Pubs”. Athens, Georgia, USA.

Nutriente Síntomas popr deficiencia de nutrientes en plantas de café
Nitrógeno
Nitrógeno
Hojas adultas: Clorosis uniforme desde la base hacia el ápice y de la vena central hacia los bordes. Cuando la deficiencia es severa, clorosis más evidente y abarca todo el limbo.

Hojas jóvenes: Clorosis a lo largo de los bordes, semejando una cinta amarilla de aproximadamente 1 mm de ancho.

Se presentan primero en hojas viejas. Los frutos se vuelven amarillos, crecen poco y caen con facilidad.

Fósforo
Fósforo
Hojas con clorosis leve, uniforme y color verde limón opaco, tornándose más amarillenta a bronceado en hojas más viejas.

Se presenta generalmente en hojas viejas. Las manchas son de diferente tamaño y pueden cubrir toda la hoja.

En casos severos, se produce una caída total de las ramas que tienen frutos en maduración.

Potasio
Potasio
Se presenta generalmente en hojas viejas. Al principio aparece amarillamiento, luego se vuelve de color pardo oscuro, solamente en los bordes y en las puntas de las hojas viejas. Un hilo amarillento limita la necrosis del borde y del ápice foliar.

Las hojas afectadas se enrollan hacia la cara superior.
Un inadecuado aporte de K puede producir granos vacios.

Azufre
Azufre
Se presenta generalmente en hojas nuevas, las que presentan una coloración verde amarillenta que comienza a lo largo de la nervadura principal.

Las nervaduras aparecen hundidas y las secciones que limitan sobresalen en relieve cóncavo. En hojas de mayor tamaño la clorosis se torna amarillenta.

Las hojas afectadas tienen un aspecto moteado que recuerda los síntomas de deficiencia de Zn o Fe.

Calcio
Calcio
La deficiencia aparece en la parte superior de la planta.

Las hojas jóvenes presentan un color verde pálido cerca de los bordes, y a lo largo de la vena central permanece el color verde. Los márgenes se ondulan.

Las hojas adultas, sin llegar hasta la abscisión, quedan colgando hacia abajo.

Cuando avanza la deficiencia las hojas toman la forma de cuchara, con márgenes irregulares.

Se presenta pocas veces en el café y esta asociada al cultivo en suelos rojos muy viejos o en suelos volcánicos muy meteorizados.

Magnesio
Magnesio
Hojas adultas: clorosis, que en casos severos se torna de color amarillo mate.

Se presenta generalmente en hojas viejas como manchas bronceadas. Las nervaduras principales siempre conservan el color verde.

El amarillamiento empieza en la base de la rama y se va extendiendo hacia la punta provocando la pérdida de hojas.

Zinc
Zinc
Zinc
Se presenta generalmente en hojas jóvenes. éstas Hojas crecen poco, en forma alargada y los bordes son ondulados; presenta una clorosis color verde pálido uniforme.

Cuando la deficiencia progresa, ocurre crecimiento en roseta, con entrenudos cortos; la clorosis se acentúa y se localiza especialmente entre las venas secundarias.

Se presenta en suelos con alto pH y en suelos erosionados con baja fertilidad.

Generalmente los síntomas de deficiencia son más visibles en la punta de las ramas.

Fierro
Fierro
Fierro
Se presenta generalmente en hojas nuevas, estas son de tamaño mayor que el normal, y la planta muestra en su conjunto, una clorosis generalizada de color verde amarillento hasta blanquecino, sobre la que se destacan nítidamente las nervaduras color verde.
Boro
Boro
Se presenta en tejidos jóvenes y generalmente aparece en épocas muy secas. Los síntomas característicos son los siguientes.

Hojas adultas: Clorosis color verde aceituna mate, que se extiende del ápice hacia la base, abarcando un tercio o más de la hoja.

Hojas jóvenes: Producto del crecimiento en “palmilla” pueden aparecer cloróticas, permaneciendo las venas verdes. El amarillamiento se inicia en la punta y avanza hasta un poco más allá de la mitad de la hoja.

Se forma tejido corchoso sobre las hojas; las hojas se deforman apareciendo torcidas, arrugadas o con bordes irregulares. Aparecen puntos de color café en las hojas tiernas y las ramas muestren un aspecto de abanico.

Manganeso
Manganeso
Se presenta en los tejidos jóvenes de la planta, estas hojas son de tamaño desmesurado con clorosis parcial o total sobre la que se destaca un retículo banda fina color verde, que contiene las venas secundarias y terciarias.

Ocurre en suelos de pH alto y se produce el amarillamiento total de las hojas de la punta de las ramas, con cierto moteado.

Cloro
Cloro
Hojas amarillas a lo largo de la nervadura principal. Muerte de las raíces.

En las hojas más nuevas, las nervuras quedan salientes. Puede tener deformación de la lámina. En plantas nuevas, las hojas se pueden curvar hacia abajo a partir de la base.

Causas: Falta de K en el suelo, exceso de materia orgánica y mucha lluvia.

Molibdeno
Molibdeno

 

Se presenta en las hojas más viejas. Aparecen manchas amarillas y después pardas entre las nervuras. Con el tiempo, esas hojas se enrollan hacia abajo a lo largo de la nervadura principal y los bordes opuestos llegan a tocarse.

La principal causa de deficiencia es la acidez del suelo.

Desorden Fisiológico Desorden Fisiológico en el Cultivo del Café
“Crespera del Café” Si bien originalmente los estudios señalaban como agente causal de esta enfermedad a un fitoplasma (parásito de las plantas), actualmente se piensa que es causada por la bacteria Xylella fastidiosa.

Los síntomas son visibles en las hojas más nuevas las cuales son de tamaño inferior al normal, con bordes ondulados, frutos pequeños y entrenudos de las ramas muy cortas.

Los brotes presentan la sintomatología de una severa deficiencia de Zn caracterizada por hojas angostas y alargadas, con bordes amarillentos y nervadura central verde. Si los síntomas no son muy severos, los brotes pueden crecer formando un nuevo árbol con entrenudos muy cortos, hojas angostas y pequeñas, de bordes ondulados y escasa o nula formación de frutos. En un mismo árbol pueden aparecer ramas sanas y ramas afectadas por “Crespera”.

A veces la anomalía es tan severa que el aspecto de las hojas hace recordar los daños provocados por algunos herbicidas.

El trastorno se presenta en cafetales establecidos en suelos de origen sedimentario, en aglomerados y conglomerados coluvio-aluviales andesíticos y en suelos derivados de cenizas volcánicas.

Los factores físico – químicos que aparentemente están asociados con el problema son: El exceso de humedad en el suelo, el alto % de aluminio intercambiable (> a 40% de saturación), pH bajo (< 5.0 en agua y < 4.5 en KCL), bajo contenido de zinc en el suelo, relativamente alto contenido de P soluble en el suelo Y bajas temperaturas.

Aun cuando no se conocen exactamente las verdaderas causas del problema, se recomienda adoptar las medidas para eliminar o reducir los factores considerados como predisponentes.

Fitoxicidad por Biuret El Biuret es un compuesto formado por dos moléculas de urea que se condensan con eliminación de una molécula de amoníaco. Es un compuesto nocivo para las plantas, y su peligro de toxicidad es mayor cuando se usa urea que contiene Biuret en aspersiones foliares, particularmente si se usa en mezcla con caldo bordelés con exceso de cal y en condiciones de alta temperatura ambiental.

Los síntomas de toxicidad por Biuret se presentan como un moteado clorótico entre las nervaduras secundarias y hacia el borde de las hojas. Si las aplicaciones continúan, las hojas en formación quedan de tamaño reducido y tanto éstas como las más viejas forman una pronunciada concavidad hacia el envés. El daño aparece primero en las hojas más tiernas y la clorosis provocada no desaparece al suspender las aplicaciones, pero las hojas que surgen después de la supresión son normales.

En estudios llevados a cabo en India, se ha obtenido que una concentración máxima del 2% de Biuret en la urea es crítica para aspersión foliar en café. Otros experimentos llevados a cabo en Colombia para determinar la concentración crítica de Biuret en la urea granulada empleada en repetidas aspersiones foliares de plantas de café en almácigos, indican que se puede administrar hasta 1% de contaminación de Biuret y los intervalos entre aspersiones no deben ser inferiores a 15 días. Además se encontró que el daño por Biuret puede ser acumulativo.