Puerto de Tocopilla: Desde el salitre a industrias estratégicas para la sustentabilidad
14/Oct/2020
Desde el esplendor del salitre hace más de un siglo, y la reinvención de esta industria en los años 80, el puerto de Tocopilla, actualmente administrado por SQM, ha sido una pieza clave para el desarrollo de la ciudad al consolidarse como uno de los principales puertos del país.
En 1880 Tocopilla tras anexarse a territorio nacional alcanzó la categoría de puerto mayor, dado su carácter estratégico para la economía nacional de la época. En la década del 30´ se conectó la pampa con el puerto de Tocopilla a través de una vía férrea, favoreciendo la proliferación de nuevas oficinas salitreras, como María Elena en 1926 y Pedro de Valdivia en 1931, entre otras.
La época del salitre finalizó, pero SQM reinventó esta industria al innovar con un nuevo proceso productivo único que dejo atrás al “oro blanco” para dar paso a la elaboración de nitrato de potasio, fertilizante de especialidad 100% natural y con la menor huella de carbono del mercado; Tocopilla continúa siendo la puerta al mundo de este y otros productos, como el cloruro de potasio y las sales solares que consolidan a Chile como un productor de insumos fundamentales para el desarrollo sustentable de la humanidad.
Mejora continua
Desde la construcción en 1959 del emblemático brazo mecanizado que permitió agilizar los embarques mediante correas que transportan el producto granel directo a las bodegas de los buques, el puerto inició una etapa de mejora continua orientada a la modernización de sus instalaciones y la optimización del proceso logístico. Todo ello bajo una mirada sustentable que vela por la seguridad y bienestar de sus trabajadores, junto con un fuerte compromiso en materia medioambiental. Este proceso de reinvención se acentuó a partir de 2014, con la implementación de la metodología Lean, modelo de gestión japonés que busca agregar valor a los procesos, generando un cambio cultural al interior de la compañía.
SQM constantemente revisa y adecua su infraestructura para mejorar el desempeño operacional y medioambiental, así surgen proyectos como la ampliación de canchas de acopio que permitirá aumentar en un 30% su capacidad de almacenaje y mallas ambientales en las canchas para reducir las emisiones. También destaca el adoquinado del puerto que disminuye la emisión de polvo generado por los camiones, garantizando así la calidad de los productos allí almacenados. El proyecto busca cubrir el 100% de las instalaciones del puerto, lo que le dará un estándar internacional.
Actualmente, en el puerto trabajan más de 300 hombres y mujeres de Tocopilla quienes hacen posible que Chile a través de los productos de SQM esté presente en industrias estratégicas para el desarrollo humano como la alimentación y las energías limpias que mueven el mundo. Ellos, junto a sus familias y la comunidad participan en diversas iniciativas o programas orientadas al desarrollo sustentable de la comuna, y que son impulsados por SQM bajo su plan de acción comunitario que aborda los ejes: Desarrollo Social, Educación y Cultura, Rescate Patrimonial y Vida Sana.
“La historia nos ha enseñado que la innovación es clave”, explica Pablo Pisani, gerente de Comunicaciones, Sustentabilidad, y Asuntos Públicos de SQM, quien puntualizó que: “Nos atrevimos a reinventar esta industria, y hoy nos sentimos orgullosos de que el nuevo salitre se llame nitrato de potasio, un producto inventado en el norte de Chile y que actualmente es la materia prima preferida para mejorar la alimentación a través de una agricultura sustentable, y donde el puerto de Tocopilla juega un rol fundamental en el encadenamiento productivo que nos permite llegar a 110 países con nuestros productos”.
También desde Tocopilla, SQM exporta sales solares que hacen posible dar continuidad energética a las plantas de concentración solar; un producto 100% natural y que genera energías limpias e innovadoras que garantizan estabilidad energética las 24 horas del día durante los 365 días al año.
SQM bajo sus cuatro valores corporativos: Sustentabilidad, Seguridad, Integridad y Excelencia, es una empresa que ha sido capaz de adaptarse a condiciones cambiantes del mercado mundial. La base de esa adaptación ha sido su capital humano y su capacidad para innovar en los procesos productivos, comerciales, logísticos y de gestión. Además, con el claro propósito de elaborar productos para un mundo sustentable de la mano de una operación responsable que está minimizando sus emisiones, uso de agua, huella de carbono y contribuyendo al cuidado del medioambiente.